DISCORDIA


“Fiebre es un síntoma, es un estado de ánimo, fiebre es un giro brusco en la frágil estabilidad de nuestro cuerpo y nuestra cabeza, fiebre es lo que nos entra cada noche junto a la persona que se ama o en el interior de un bar o incluso componiendo una canción…” Vicent (cantante y bajista de Discordia) explica así el título de su nuevo disco…

por Fran Llorente

Añade más: -A eso se refiere también el tema. Deseo, irreverencia, ímpetu… todas esas cosas.
¿Qué evolución sonora habéis experimentado desde los anteriores ‘Con el filo de la lengua’ (08) y ‘Todo empieza hoy’ (06)? ¿Habéis quedado contentos con la producción de ‘Fiebre’? -La producción ha corrido de nuestra cuenta, no queremos que nadie dirija nuestra forma de entender la música y nuestra manera de construir las canciones. Pero sí que ha habido una progresión en cada disco, una mejora en lo referente al sonido de los instrumentos, al matiz, al acabado de cada una de las canciones. ‘Con el filo…’ ya fue un gran avance respecto a todo lo anterior, pero el tiempo y la experiencia te enseñan y éste es nuestro disco más propio y mejor hecho.
¿Habéis sonado en muchas radios comerciales en los dos o tres últimos años? ¿Es la promoción y pasar por el aro lo que marca las pautas y las ventas? -En nosotros te puedo asegurar que no hay ningún tipo de fórmula comercial ni propagandística, sencillamente hacemos lo que sabemos y lo que nos gusta. Si hay alguien a quien le gusta todo esto (habíamos mencionado a grupos como Pignoise, Despistaos, Dikers…) y nos sigue, todo ha merecido la pena. Pero si nos hemos abierto camino, ha sido así, sin ayuda de nadie y sin buscar el aplauso fácil.
¿Os sentís como en vuestra canción ‘Acorralado’?, porque al final casi nadie puede vivir de esto. -No, no nos podemos sentir acorralados por ese motivo porque cada uno nos ganamos la vida, trabajamos como cualquier hijo de vecino. La música es algo que se hace con el corazón; si no da para vivir, sí hace posible vivir. Seguiremos de todas formas, pese a quien pese, mientras haya alguien en alguna parte al que le emocione nuestra música.
Persecución de los emigrantes (como cantáis en ‘Duna’), corrupción y urbanismo salvaje (‘Country for sale’), explotación laboral (‘Ojos que no ven’). ¿Vivimos tiempos especialmente jodidos, un ciclo histórico muy oscuro, como escribía Saramago? -También alguien diría que, para oscuridad, en la que viven aquellos que no tienen qué echarse a la boca, o que tiempos oscuros fueron aquellos en los que un dictador mantuvo a todo un país durante 40 años. Injusticia y dolor habrán mientras haya tantas diferencias, mientras unos tengan mucho y otros muy poco, mientras algunos gobiernen imponiendo sus ideas y otros tengan que tragárselas; es la misma naturaleza humana la que muchas veces nos arrastra a la negrura, y eso es lo que se grita en este y en los otros discos.
¿Cómo surgen las colaboraciones con Pulpul (de SKA-P) y con Jesús Cifuentes (Celtas Cortos)? -Por empatía, por haber compartido algo con ellos y por haberlos seguido, por creer que ellos tenían el último ingrediente de esas canciones. Así han surgido siempre nuestras colaboraciones, nada comercial ni de postal.
Por último, tocasteis el año pasado en el encuentro de peñas del Barça en Totana (Murcia). ¿Fuisteis porque os llamaron -simplemente- o porque compartís afición por el club catalán? ¿Os gusta el buen fútbol? -Ante todo porque nos llamaron con todo el gusto del mundo, y después, claro, dos de los miembros del grupo somos del Barça y nos gusta el fútbol, pero eso es meramente personal y no tiene nada que ver con la trayectoria de Discordia.
Discordia actuará en Madrid el 5 de noviembre, en la sala Gruta 77.

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DISCORDIA      
Fiebre          
(Maldito/ Nómadas en Acción)

Sin cargar las tintas, a medio camino del Rock urbano y el Punk-Rock fresquito, este cuarteto murciano se ha ido labrando un hueco en el panorama estatal. Ahora nos presentan su quinto disco, ‘Fiebre’, un conglomerado suave de canciones protesta y vivencias varias. Y de paso nos invitan a posicionarnos, a mostrarnos si estamos en un lado o en el otro de la balanza, ‘¿De qué lado estás?’, nos preguntan: “O contemplas el paisaje o dibujas otra realidad, o caíste en la emboscada o resistes como un animal, o la sanidad privada o un derecho universal…” Ellos toman partido en doce cortes muy interesantes, que nos impelen a vivir y a resistir, a ser críticos con el sistema y a pensar por nosotros mismos, y que nadie conduzca tus destinos. Retratos sobre la realidad cotidiana: ‘For sale’, dedicada a la especulación y urbanismo salvaje, ‘Duna’ a las mujeres emigrantes que viven la cruz del sueño europeo y que pagan con su vida en una patera; ‘Acorralado’, grito sordo contra el estado policial, etc. añadiendo unas cuantas invitaciones luminosas, la otra cara de la moneda en estos tiempos oscuros que vivimos. Nos conminan a disfrutar ‘Mil y una noches’, a seducir y dar placer -‘Intro-misión’- en vez de vejar y maltratar, con una ‘Canción de cuna’ como broche final. “Suelo minado, pasea libre, a gatas… por el tejado.” “Mañana mamá te cantará nuestra canción, te cantará revolución.” Si te gustan Fito y Boikot, Discordia no te defraudarán. “La noche se hizo para soñar… estoy ardiendo, ¡tengo fiebre!”                                                                                                            
Fran Llorente



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